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miércoles, 9 de junio de 2010

FELIPE CHARA FORI

UN JINETE APODADO “EL HOMBRE DESCALZO”
(Testimonio grabado y editado el día 4 de junio de 2010 por: Giovanni Arnulfo Ramírez (periodista Acord Meta)

Nacido el 28 de enero de 1927 en tierras del departamento del Cauca, Felipe Chara Fori, toda su vida quiso ser jinete pero sus pies fueron muy veloces y siempre en los descansos dominaba a sus compañeros de labores en las carreras cortas, esto lo hacia en el Hipódromo de Cali . Por ello llamó la atención del entrenador de atletismo Robert Bambel, quien lo hizo ir a la pista del estadio “Pascual Guerrero” y se sorprendió al verlo correr sin zapatillas y sin pensar dos veces lo llamó “el hombre descalzo”

En su primera aparición como atleta, Chara Fori, tuvo que medir fuerzas con Jaime Aparicio en los 400 metros, quien lo derrotó y lo dejo con el subtitulo nacional. A medida que pasaba el tiempo su estilo de velocista fue mejorando lo que le permitió integrar el equipo campeón del Valle en las postas de 4X100 y 4X100 y ser convocado varias veces a la selección Colombia para competencias internacionales.

Porqué le fascina hablar más de caballos que de atletismo?
A mis gustaba los caballos; mis primeros trabajos lo hice en el Hipódromo de Cali, tanto era mi fiebre por ellos que llegue a tener una cuadra con quince caballos, pero la inexperiencia de la vida me obligo irme para el Líbano, Tolima, donde había un hipódromo y volví a insistir con estos animales y me dedique a la preparación, crianza y venta de ellos; en esa población conocí a Jaime Benito Delgadillo y al médico Alfonso Ortiz Bautista, a quien le vendí un caballo.

Hice tantos negocios que me quebré y decidí regresar a Cali donde monte un deposito de materiales, oiga y aunque no me crea volví a quebrar; tuve un camión lo fie y me lo robaron, con tantas rachas opte por irme para Bogotá donde estabas mis hermanos Azael y José Chara que eran jinetes y trabajan el Hipódromo de Techo.

Una tarde cualquiera estaba desprogramado y como aburrido en Bogotá, les pregunte que donde quedaba Villavicencio? Y ellos me respondieron ahí pasando esa lomita.

Me vine con ocho pesos, sin conocer a nadie llegue a Villavicencio; eso fue por allá a mediados de 1966, me hice amigo de los profesores Elías Pardo y Álvaro Casas, quienes me ayudaron mucho para poderme vincular al atletismo del Meta. Tuve suerte porque me vine a trabajar a estas tierras en lo que fuera.

Y como fue su labor como técnico?
Lo desarrolle en la pista de atletismo del colegio Industrial, también hacíamos algunas competencias en la vieja cancha del estadio “Macal” que quedaba en el barrio el Barzal, mi objetivo era preparar los deportistas que se alistaban para los Juegos Intercolegiados; de esa camada se destacaron varios de ellos que logaron a ser campeones nacionales como Oscar Loboa, Raúl Páez, Miguel Piñeros Serrada, Miguel Galarza, Marina Balanta, Rosalba Prieto y Luz Marina Rueda entre otros.

Agradecido con atletismo?
Claro que sí, hoy disfruto mis hijos, de mi familia y de mi casita, este Departamento ha sido noble y generoso conmigo. En mis últimos años tuve una fabrica de decol, recorrí todo el Meta pero los años no pasan y opte por retirarme (risas...que quede claro que en esta ocasión no me blanquie!!!); debo agradecerles a Dios y a muchos amigos por su apoyo brindado para que saliera adelante con mis deportistas y el Meta logrará figurar a nivel nacional e internacional.

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